Siempre es más fácil para el que se va.
Hablamos idiomas distintos, no es necesario entender para comprender lo que quiere decir el otro.
Sobre todo cuando se trata de un adiós.
Siempre es más fácil para el que se va.
Hablamos idiomas distintos, no es necesario entender para comprender lo que quiere decir el otro.
Sobre todo cuando se trata de un adiós.